Si pudiera hacer un conteo de la cantidad de mujeres que se han acercado a mi para decirme lo maravilloso que se ve el Pole pero que ellas no nacieron para eso, o que no podrían ni siquiera intentarlo porque “su cuerpo no es tan fuerte y no se los permite”, ufff no me acercaría ni remotamente a la cantidad total de comentarios escuchados.
Por eso, hoy les quiero dar varios consejos a quienes ven al Pole con ojos de amor pero nada más no se animan a entrarle:
1. NADIE NACE SABIENDO
Muchas de quienes estamos en esto, y me incluyo, empezamos así como tú vas a empezar: sin fuerza, sin condición física, equivocándonos (y seguimos haciéndolo) y demás.
2. DEJA DE CRITICARTE Y/O INSULTARTE
Tu cuerpo y tu capacidad mental son perfectas para iniciar en la práctica del Pole ¡así tal cual están! Obvio no comenzarás a ponerte de cabeza y hacer cosas de nivel avanzado en el minuto uno de entrar a tu clase: Todo es un Proceso, cuando menos lo esperes ya estarás en esos niveles. Pero algo es verdad, si no dejas de hablarte así tu mente jamás te dejará hacerlo.
3. ¡PRUEBA!
¿Cómo puedes decir que no estás hecha para algo si no lo has probado antes? ¡Deja que tu cuerpo y tu mente te sorprendan!
4. NO TE COMPARES
Sobre todo, no te compares con las más avanzadas o con las Pros, enfócate en tu proceso, disfrútalo, no tienes que ser necesariamente una alumna nivel avanzado para ser una buena Poler y bailar hermoso. Lo más lindo del Pole es que lo disfrutes Tú.
5. ¡DISFRÚTATE!
El Pole es una herramienta mágica de auto aceptación, toma tus clases con la mente y los brazos abiertos a recibir la enseñanza que debas recibir ese día, ¡te aseguro que comenzarás a romper muchos prejuicios!
6. SÉ PERSEVERANTE
No te voy a mentir, sí es difícil pero ¡NO TE RINDAS! te ayudará a reforzar la paciencia, la disciplina y la perseverancia!
Y me faltan muchos más pero, estos son los principales. Pero tú éntrale a las clases, ¡deja de postergar!